¿Qué tercerizar en tu emprendimiento? ¿Cómo hacerlo? ¿Cuándo hacerlo?

La tercerización, bien utilizada, puede convertirse en un instrumento estratégico clave para la optimización de costos, aumentar la productividad y lograr mayor rentabilidad en un emprendimiento.

La tercerización consiste en la contratación de un servicio externo de consultoría, con el objeto de que realice una parte del proceso productivo para el cual el emprendimiento no cuenta con el personal especializado.

De esta manera, se evitan pérdidas de tiempo y se favorece la concentración en aquellas actividades para las que sí están capacitadas y constituyen la base central de su negocio. Pero a fin de que una tercerización sea exitosa, deben tenerse en cuenta algunos aspectos.

 

¿Qué tercerizar en un emprendimiento?

Todo emprendimiento requiere de la realización de muchas actividades, todas importantes, pero hay algunas que son vitales y demandan la máxima atención y otras más rutinarias que pueden ser delegadas externamente.

 

Para identificar qué operaciones se pueden tercerizar, hay que considerar lo siguiente:

Algunos servicios se caracterizan por ser muy solicitados:

Otros todavía no lo son tanto:

Cuánto y qué tercerizar no es una decisión aislada, sino que debe estar a tono con la estrategia del emprendimiento.

 

¿Cuándo se debe tercerizar en un emprendimiento?

El momento adecuado para implementarla no es el mismo en cada emprendimiento, en la medida en que dependerá de cómo hayan sido planificadas las estrategias de corto, mediano y largo plazo.

Cuando las actividades tienen mayor exposición al riesgo, la tercerización conviene realizarla desde un principio para disminuirlos; caso contrario, a medida que el emprendimiento va creciendo, llegará un punto en el cual será más ventajoso tercerizar para ganar eficiencia.

 

¿Cómo tercerizar un emprendimiento?

La creciente tendencia y la cada vez mayor cantidad de proveedores obligan a comprender qué aspectos determinan una exitosa estrategia de tercerización:

La tercerización puede optimizar el rendimiento de una empresa mientras no afecte sus actividades vitales, su rentabilidad o su competitividad. Los costos pueden parecer altos al principio pero los beneficios futuros bien los justifican.