Aplica estos tips para hacer crecer tu emprendimiento más rápido
Para cualquier emprendedor que empieza su negocio siempre vendrá a su mente una pregunta fundamental a plantearse: ¿cómo puedo hacer crecer mi negocio? Porque una cosa es iniciarlo y otra muy distinta hacerlo rentable y hacerlo trascender para que crezca cada día.
No importa que tan pequeño sea un negocio, muchas grandes empresas importantes de hoy, iniciaron sus operaciones en espacios pequeños. Sin embargo, emprender es una tarea exigente en donde el reto es ampliar el negocio de manera continua y posicionarse en el mercado.
Si crecer es lo que busca, aplicar estos principios le ayudará a crecer, sin importar cuál es su emprendimiento. No olvide que también es necesario tener pasión por el negocio y trabajar duro cada día hasta que se convierta en la gran empresa que ha soñado.
- Misión clara, objetivos definidos y visión
Es importante saber dónde se está y a dónde se quiere llegar para definir los pasos a dar. Establecer objetivos claros, medibles, específicos y realistas ayudará a fijarle un rumbo al negocio y corregirlo si se llegase a desviar del camino. Un emprendimiento sin metas que lograr, es un barco a la deriva.
Para definir la visión hay que responder a la pregunta: ¿cómo veo mi negocio en cinco años? Hay que pensar en grande y ser ambicioso. Después hay que establecer los objetivos.
Crear la misión no debe ser complicado, se puede escribir en una hoja la razón de ser del emprendimiento respondiendo preguntas como ¿qué vendo?, ¿a quién se lo vendo?, y ¿cómo lo vendo? Después se escribe en un párrafo entre cinco y diez líneas. Para recordar cuál es la misión, hay que plasmarla en un cuadro y colgarla en la pared.
Con el tiempo se tendrá que revisar la misión, visión y objetivos para hacer ajustes. No hay que preocuparse, es normal que con el tiempo puedan cambiar.
- Disposición al cambio e innovación
A medida que el negocio crezca habrá necesidad de realizar cambios para adaptarse y hacer ajustes. Para obtener resultados diferentes y hacer crecer el emprendimiento no se debe esperar a que las cosas se mantengan tal y como están desde un principio. Entre más clientes se logren mayor infraestructura se necesitará, hay que ser conscientes de realizar los cambios necesarios y no temer a ello.
- Incentivar el buen trabajo
Entre los valores más grandes de una empresa se encuentra el equipo de trabajo. Cada día es más difícil encontrar colaboradores leales, comprometidos con la visión de la empresa y preparados para desempeñar bien su trabajo. Hay que reunir un buen equipo e incentivarlos, un buen trato, condiciones justas para todos y reconocer su esfuerzo son formas de cómo mantener a los trabajadores con la vista puesta en las metas del negocio.
- Mejorar costos para subir ganancias
No se trata de realizar recortes porque sí, se trata de hacer más gastando menos. Para reducir los gastos es importante analizar los procesos de las diferentes áreas y mejorarlos. Reducir los gastos tiene como finalidad maximizar recursos y lograr mayor eficiencia. Además, siempre hay que buscar el equilibrio entre costos, calidad y productividad; esto puede incrementar los ingresos en un porcentaje considerable aumentando también la rentabilidad del negocio.
- Escuchar a los clientes
Son la base del negocio y son muy importantes. De no escucharlos la competencia lo hará, y de ser así se le estará entregando cuota de mercado. Escuchar a los clientes no solo es preguntarles qué quieren, pues no siempre lo saben. En actualidad existen estudios de mercado y otras técnicas que permiten saber lo que los clientes necesitan, posterior a ello hay que satisfacer su necesidad y cuidarlos porque son ellos quienes también ayudan a hacer crecer una empresa.
- Trabajar con los mejores
Los emprendedores exitosos no dudan en decir que siempre contratan y trabajan con personas que son mejores y “más inteligentes” que ellos. Empresas como Google o Microsoft tienen dentro de su equipo a ingenieros y programadores con mucho talento; por ello, destacan dentro del resto. Contratar a los mejores profesionales sin duda alguna hará crecer una empresa.
- Crear y promover la marca
Con normalidad muchas empresas no creen en la importancia de invertir en su marca ya sea en publicidad o diseño. De no poseer una marca hay que comenzar a trabajar en ella lo antes posible para crearle valor y personalidad. Puede ser un proceso intangible pero es fundamental para el crecimiento del negocio, aparte de darse a conocer se puede lograr establecer una relación y conexión entre la empresa y los clientes.
Además, posicionar la marca y todo lo que tenga que ver con identidad del negocio hará que los clientes recuerden y prefieran los productos o servicios ofrecidos sobre los de la competencia. De no saber cómo trabajar la marca, lo conveniente es buscar asesoría.
- Crear valor del producto o servicio
Si el precio es lo que paga el cliente por un producto o servicio, valor es lo que recibe. A medida que crezca el negocio la competencia puede volverse más dura. Una forma de mantenerse en la jugada es ofreciendo a los clientes más valor, darles más razones para que prefieran a la empresa por sobre la competencia.
- Reinvertir parte de las ganancias
Para hacer crecer cualquier negocio hay que invertir en él, es lo mejor para poder fortalecer cada una de las áreas. Lo importante es destinar un presupuesto para ello, sobre todo al principio, que es la parte más difícil, esto es una clave del crecimiento. Reinvertir en todo aquello que ayude a diferenciarse de la competencia, hará crecer la empresa de una forma saludable.
Lo ideal es crear tres fondos: uno para ahorros (como colchón de seguridad), otro para donaciones, y el último para reinvertir.
- vender, vender y vender
Definitivamente si no hay ventas no hay negocio. Se puede ser el mejor productor, tener productos o servicios de óptima calidad, pero de nada sirve si no se generan ventas. Contratar vendedores que atraigan clientes y cierren negocios es vital, se generarán ingresos manteniendo un flujo de efectivo constante que hará crecer a la empresa y mantenerla saludable. Si producir es importante, vender los productos lo es aún más.
Si bien los principios aquí descritos no se implementan de la noche a la mañana, en el mundo empresarial no hay puntos intermedios. Lo mejor es planificar y ejecutar en los momentos precisos para que la empresa pueda tener un crecimiento constante.